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Durante una conferencia de prensa realizada en el Municipio en la mañana de este jueves, el ministro de Infraestructura provincial, Gabriel Katopodis, el subsecretario de Recursos Hídricos, Néstor Álvarez, y el intendente municipal Rodrigo Aristimuño, fueron consultados acerca de las extensas demoras en la anunciada reanudación de la obra de recambio de cañerías en el casco histórico de Punta Alta, frenada hace casi un año. Responsabilizaron al gobierno nacional por el quiebre de Gral. Aseguraron que gestionan la continuidad de los trabajos.
“El problema que tuvimos ahí es que mancó (SIC) una de las empresas de la UTE – Unión Transitoria de Empresas -, que es la empresa Gral”, dijo Álvarez al iniciar su explicación.
“Gral fundió porque la mayoría de sus contratos los tenía con AYSA, que paró todas sus obras. Por una decisión del Estado nacional de parar todas las obras públicas, quebró una empresa. Esas empresas no pueden seguir con otras obras publicas porque dejaron de cobrar un montón de obras públicas y no tienen espalda para aguantar”, explicó luego el subsecretario de Recursos Hídricos de la provincia.
Ante esta situación de quiebre de una de las firmas, la provincia busca continuar la obra sin que se disuelva la UTE, lo que ocasionaría tener que llamar a licitación nuevamente y demorar aún mucho más los plazos de la obra que se ejecutó durante 1 año y medio aproximadamente, y que lleva casi un año paralizada.
“Estamos en el proceso de que Gral sale de la UTE y que la otra empresa tome la obra, Lo que se hizo hace unos meses fue tratar de tapar las zanjas con la ayuda del Municipio. Ahora se está aprobando una nueva UTE, para que se retomen los trabajos”, dijo Álvarez.
Por su parte, Katopodis señaló que “para evitar que haya que licitar de nuevo, hay que cumplir el objetivo de completar al menos el 30% de la obra, para que no se caiga la UTE y no tener que licitar todo de nuevo, que puede demandar 1 año más".
“Hay una cuestión fáctica es que la empresa que estaba ejecutando la obra, no puede seguir”, añadió.
El intendente Aristimuño se refirió al quiebre de la empresa Gral, asegurando que “tuvimos la tercer devaluación de la historia en el mes de diciembre y eso hizo que la empresa quebrara y se rompieron los contratos”.
“Pero hubo una decisión política importante del gobernador Axel Kicillof y del ministro Katopodis para seguir la obra”, agregó el jefe comunal.