El domingo 25 de junio de 1978, una multitud se volcó a las calles y plazas del país para festejar la victoria de la Selección Argentina de fútbol ante su homólogo de Holanda, obteniendo su primer título a nivel ecuménico.

Punta Alta no fue la excepción y un gran número de puntalteses se agruparon en Bernardo de Irigoyen y Paso, mientras que una larga caravana de vehículos hicieron sonar sus bocinas por toda la arteria principal de la ciudad.

En diálogo con Radio Rosales, Chiche Genari, quien se encontraba presente el día de tamaña celebración, explicó cual fue su rol el día de la consagración: "Me permitieron musicalizar desde el balcón de una vivienda, arriba de la galería Cometa. Una vez que la victoria en la final de la Copa del Mundo era un hecho, empezamos a tocar la marcha que se utilizó para ese mundial. La gente empezó a amontonarse frente a la galería, y luego para el lado de Titán y Farmacia Del Puerto. Era tanta la cantidad de gente saltando, que una de las veredas céntricas se hundió".

Banderas, bufandas y gorros celestes y blancos, gritos de aliento y, significativamente casi ninguna camiseta argentina, se hicieron presentes esa tarde de invierno.

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