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Las Fuerzas Armadas estarán en zonas de frontera. Así lo afirmó el ministro de Defensa de la Nación, Luis Petri, a sus pares del continente, durante la Conferencia de las Américas que se desarrolla en la provincia cuyana. El funcionario aseguró que el Poder Ejecutivo modificará el Decreto 727/2006 que reglamenta la organización militar para que pueda intervenir en los controles limítrofes, en base a la Ley de Defensa.
“Con la modificación y derogación del Decreto 727, las Fuerzas Armadas se van a poder desplazar en zonas de seguridad en frontera, en complementación de las fuerzas de seguridad y en cooperación con los países limítrofes”, adelantó Petri en la apertura de la XVI Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas, que concluye el jueves. Fue una clara alusión a la situación que se vive en el norte del país, frontera que el mismo Petri calificó tiempo atrás de “colador”. La medida podría comenzar a hacerse efectiva en las próximas dos semanas.
En esa línea, puso como ejemplo la tarea realizada entre las Fuerzas Armadas y las de Seguridad en Rosario, en la lucha contra el narcotráfico. “El apoyo de las Fuerzas Armadas a la operación bandera en Rosario ha permitido, entre otras cosas, que las fuerzas de seguridad tanto nacionales como provinciales hayan combatido y haya una baja exponencial y drástica de los homicidios que ocurrían y azotaban a Rosario. No podemos desconocer el aporte sustantivo y sustancial que han hecho las Fuerzas Armadas a esta operación para que sea exitosa”, señaló.
En este marco, hizo alusión a la importancia de trabajar mancomunadamente con las naciones vecinas. “La cooperación con los países limítrofes para justamente atacar flagelos comunes que tenemos en nuestras fronteras. Para eso es absolutamente imprescindible la actuación coordinada, articulada y colaborativa con los países de la región, en donde, entre otras cosas, es imprescindible compartir información”, comentó el titular de Defensa durante el foro multilateral, integrado por representantes de los 24 países miembros, a excepción de Cuba, Nicaragua y Venezuela, el cual tiene como objetivo fomentar la cooperación internacional a través del análisis, debate e intercambio de políticas de defensa y seguridad nacional. Entre los principales temas que se abordarán durante el encuentro en Mendoza está la amenaza del terrorismo en la región, el crimen organizado y el narcotráfico.
“Grupos criminales transnacionales, narcotráfico, terrorismo y sus redes de apoyo, la pesca ilegal, la minería ilícita, el tráfico de personas y la quema intencional de bosques, así como los desplazamientos forzados por persecución política o falta de desarrollo, representan desafíos complejos para nuestra región”, señaló el funcionario nacional.
La conferencia fue instituida en 1995, con una titularidad rotativa por dos años. En este sentido, Argentina fue elegida por los Estados Miembros como sede para el período 2023-2024, cuya presidencia es ejercida por el Ministro de Defensa del país anfitrión. Por eso, Petri cumple el rol de presidente pro tempore. Es la segunda vez que la Argentina lidera este encuentro internacional, ya que fue sede en 1996, en la Ciudad de Bariloche, bajo la presidencia de Carlos Menem.
Venezuela e Irán
“La Argentina se posiciona hoy como un actor dispuesto a cooperar proactivamente, reconociendo que solo a través de la acción mancomunada podremos afrontar los desafíos multidimensionales que afectan tanto a nuestra región como al mundo entero”, indicó Petri, y agregó: “Hoy vemos que en países de nuestra región la democracia ha sido demolida en sus cimientos, en sus principios y valores fundantes: países que conservan fachada democrática pero que encarnan rabiosas autocracias, como ocurre en Venezuela”.
En este sentido, fue más allá en el mapa geopolítico mundial e hizo hincapié en las advertencias sobre la estabilidad de la seguridad en la región. “La presencia de actores extrahemisféricos que apoyan regímenes no democráticos, como Irán, es una grave amenaza. Estos regímenes utilizan el aparato represivo de sus Estados para perseguir opositores, alterar la discusión política y amenazar la integridad territorial, mientras amparan actividades ilegales. Estas acciones han generado mayores grados de opresión y han obligado a muchas personas a resignar su derecho a vivir una vida plena en sus países”.
Por tal motivo, puso en valor la necesidad de actuar en conjunto frente al crecimiento de la tensión en Medio Oriente y en Europa. “El hemisferio occidental no queda exento de las dos guerras en curso que amenazan la estabilidad internacional. Ucrania lucha por su integridad territorial e Israel por su derecho a existir, y ambos por su supervivencia. Esta cumbre se celebra en un mundo donde la paz ya no está garantizada, y debemos reflexionar sobre las consecuencias que estas guerras tendrán en nuestros ámbitos de interés y sobre las condiciones de paz que emergerán de estos conflictos”, sostuvo Petri.