Se cumplen 50 años de la tragedia en la Cordillera de Los Andes en la que jóvenes integrantes de un club de rugby amateur uruguayo y algunos familiares, se estrellaron con el gigante andino mientras iban en pleno vuelo y tuvieron que permanecer varados 72 días, dejados a su suerte.

Antonio José Vizintín Brandi, quien en ese entonces tenía tan sólo 19 años, habló con Radio Rosales, relató su experiencia imborrable, pasando por los momentos iniciales, las dificultades para sobrevivir, los sacrificios que tuvieron que realizar en cuanto a alimentación, las dudas que le surgieron sobre su fe, la desesperanza de no saber si serían rescatados, el momento en el que el accionar de un arriero les salva la vida y cómo comparó ésta experiencia con el aislamiento en el año 2020 debido a la pandemia.

“Estaba boca abajo colgando de la cintura. Lo que podía hacer era sentir, y sentía los gritos de desesperación, el llanto, los pedidos de ayuda. Estaba viviendo el caos”.“El frío, la sed, el hambre. Fueron todas cosas que nos llevaron a nuestros límites. Es increíble como sos capaz de soportar ese frío tremendo de entre veinte y cuarenta grados bajo cero”.

“De noche me desanimaba cuando estaba listo para dormir, se me venía el mundo abajo. Sin embargo, al otro día me ponía el uniforme de invencible que tenés a los 19 años y salía a lucharla nuevamente”.
“Si la muerte me iba a encontrar, me iba a encontrar luchando para salir de ese lugar”.

En relación a sus compañeros caídos, agregó: “Sentíamos que los buenos se morían para dejar de sufrir y los malos éramos los que quedábamos porque teníamos que seguir sufriendo para después morirnos”.

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