Residentes de la calle Paso, entre 9 de Julio y San Martín, aseguran que conviven desde hace más de cuatro meses con aguas servidas en la vía pública, sin que haya una solución por parte de las autoridades.

Según relatan, en la vereda par brota agua del asfalto y, en la vereda impar, se registran constantes desbordes cloacales desde la tapa de un registro. La situación se da frente a un policonsultorio médico, a solo dos cuadras de una escuela y a cinco de la plaza central.

A pesar de los numerosos reclamos a ABSA, la respuesta —afirman— ha sido infructuosa. “La semana pasada nos dijeron que figuraba como reparado y que iban a tomar un nuevo pedido”, comentaron los vecinos, que también apuntan contra el área de Infraestructura del Municipio por la falta de respuesta.

“La falta de solución atenta contra la salud de quienes pasamos y entramos todos los días estos líquidos cloacales a nuestros hogares. ¿Será que solo hay que soportar el abandono y la desidia?”, cuestionaron, poniendo incluso en duda el sentido de seguir abonando por un servicio que no funciona.

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