Desde el día de ayer, se oficializó el aumento en el precio del pan para todo el territorio de la Provincia de Buenos Aires.

Según indicaron, el bien podría llegar a costar entre $460 y $500 por kg. para el mes de diciembre, preocupando tanto a productores como consumidores, debido a la cotidianeidad de su uso, su gran diversidad de aplicaciones y por ser un producto de venta diaria.

La fuerte suba del precio del trigo, la no adhesión de algunos molinos al fideicomiso, y el aparente atraso en los pagos a los molinos que sí se adhirieron, serían algunas de las razones por las cuales se disparó el precio del pan y demás derivados de la harina.

Con respecto al mismo período en 2021, el kg. de pan sufrió un aumento de entre un 10% y un 15%, llegando a costar $160 pesos en diversas panaderías de Buenos Aires. En el caso de la docena de facturas, su valor se elevó a $360.

En el plano local, las panaderías de la ciudad comenzaron a advertirle a los vecinos sobre los nuevos precios del panificado, a medida que se sumaban a los nuevos valores.

Un comerciante del rubro de zona centro explicó que, en su caso, los precios de los insumos vienen aumentando una vez por semana, hace cuatro semanas. El precio actual del kg. de pan en su comercio ascendió a un total que varía entre $350 y $380 dependiendo su variedad, habiendo sufrido un gran aumento por última vez en el mes de septiembre.

Con respecto a las consecuencias del aumento de la harina en otros productos derivados, agregó: “Notamos la baja en la venta de facturas y bizcochos. La gente está comprando menos”.

En panaderías de barrio, se puede adquirir el kilo de pan cercanos a los $280, y en otros el precio no se ha modificado aún.

Otro panadero de Punta alta, consultado por cambios en la forma de consumo de sus clientes, indicó que “la gente ya no compra más de a un kg. de pan, compran de a medio kilo o una tirita”.

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