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En el día de ayer, la Asociación Bomberos Voluntarios de Punta Alta recaudó más de 4000 litros de agua potable, en su campaña de donaciones que culminó con la caminata familiar.
Se realizó en la mañana del domingo y contó con la participación de más de un centenar de personas. Los packs de botellas fueron entregados por participantes de la actividad, familias puntaltenses e instituciones rosaleñas.
Tanto el inicio como el final de los 3,5 kilómetros recorridos fue la entrada del cuartel de los bomberos, quienes acompañaron a los caminantes durante la travesía.
Esta recaudación se utiliza como parte del equipamiento de los trabajadores que combaten el fuego, una tarea que se torna más dura en la temporada estival.
Raúl Rodríguez, Presidente de la comisión directiva de la Asociación Bomberos Voluntarios, destacó la participación de los rosaleños en la recaudación de botellas y packs de agua: “Siempre sale una idea nueva. Agregamos esto, aquello y la gente respondió con todo. Estamos haciendo un cálculo estimado de 4000 litros de agua solamente hoy, así que más que feliz, no solamente por lo recaudado en agua, sino por la participación de la gente”.
“Hemos superado no solamente las expectativas, sino también el agua en cantidad con respecto a años anteriores. Un número estimativo ronda cerca de los 10000 litros de agua, en estas dos semanas que fue el punto fuerte”, indicó consultado por la cantidad total de agua recibida durante la campaña completa.
Rodríguez comentó que, según los pronósticos, se aproxima una temporada estival de mucho calor y con un elevado consumo de agua: “El estado mecánico de las unidades es bueno, todas tienen la VTV realizada. Obviamente, el gasto de combustible es un gasto que vamos a tener. Nos está complicando el tema del aumento del costo del combustible, donde el litro que paga el vecino o cualquier servicio es el mismo que pagamos nosotros. Tenemos los fondos, pero son fondos que tenemos que enfriar, evitar comprar algo, rezar para que no se nos rompa ningún vehículo o que no nos surja ningún gasto imprevisto”, concluyó.
Sumado al atractivo de la actividad pedestre, se contó con puestos de control de la salud, el acompañamiento musical de la banda del Instituto de Música Crucero General Belgrano, mesa dulce como forma de colaboración monetaria y un punto de encuentro para quienes hayan decidido asociarse a la institución.
La jornada continuó con la presentación de La Murga de la Abuela y concluyó con el sorteo de dos lechones asados y un cordero con mesa servida.