Tras los inconvenientes con el servicio de gas y otras obras en edificios escolares del distrito, desde el municipio expusieron las razones y el mecanismo de acceso al dinero del fondo educativo destinado al mantenimiento y puesta en valor de estos espacios.

Respecto de ello, consultamos al Secretario de Obras y Planificación, del municipio rosaleño, Ignacio Torrontegui quien advirtió, en primera medida, que “esto no es una denuncia pública, sino que es una manifestación política, como estamos acostumbrados a escuchar simplemente. Tirar una mentira sobre la mesa es muy fácil. Acá está todo documentado, nosotros tenemos un seguimiento exhaustivo de cada expediente del fondo educativo. Cada obra del fondo se hace por expediente”.

“Hay escalas de gastos, una que es el mantenimiento- obras de gas, obras pequeñas-, que vienen del dinero que manda la provincia al Consejo Escolar; y otra que atiende obras medianas – ampliaciones de aulas, obras de techos, gabinete, caldera o laboratorio- que son de 100 millones de pesos por año y lo vamos dividiendo en todas las escuelas” indicó.

Sobre cómo se determina en que escuelas se debe hacer esa inversión, el funcionario explicó “eso se hace con la comisión de UGD, por la cual, funciona espectacularmente, donde se incluyen todos los gremios, directivos, consejo escolar, los inspectores, etc. Y donde cada uno sabe las necesidades que tiene cada establecimiento y de acuerdo a lo que UGD dice, nosotros atacamos en lo que son las obras. Siempre hemos respetado el pedido de Unidad Educativa de Gestión Distrital”.

Sobre lo expuesto por los ediles de Bien Común y del FDT sobre el destino de los 160 millones de pesos para el fin educativo, Torrontegui aclaró: “decir que ‘el dinero está parado’ –o en plazo fijo- es muy sencillo. Cada obra se licita, nosotros no podemos entregar una obra por contratación. Son obras que tienen montos muy grandes y si cuestan menos de 6 millones se da una licitación privada, y si es más, es una licitación pública; por ejemplo, un aula tiene una inversión de cerca de los 8 millones de pesos. Nosotros hacemos la solicitud del pedido de obra con el Fondo Educativo, comprometemos ese dinero, licitamos y ese dinero ya queda abocado a esa obra, queda comprometido. Luego, se va pagando por certificaciones, nunca pagamos por adelantado. Todo ese dinero desde la secretaría de economía se sabe el destino del dinero y, con mucho criterio, lo pone en el banco -en un plazo fijo- más como está el país, porque si no se elevan los montos y cuando finaliza una obra no alcanzan para nada. Gracias a eso tenemos el dinero, que está afectado. En los años que estamos nunca hemos tenido observaciones, ni por falta de dinero, ni por dejar de pagar una obra o que, por una obra, el dinero haya sido mal liquidado”.

“Es una mala intención decir: ‘tienen 160 millones’, y seguro que son 100 millones. No son 160 millones, serán 120 millones. Por gestiones del Sr. Intendente hemos conseguido que, después de 20 años, se haya licitado y empezado, esta semana, la obra de los talleres de la Escuela Técnica. Ese dinero proveniente de la provincia, fue entregado por la División Pcial. De Infraestructura Escolar – de alrededor de 40 millones de pesos- porque si lo hubiéramos tomado del Fondo Educativo no hubiéramos podido hacer obras en cuatro o cinco escuelas, por ejemplo. Entonces, con ese dinero extra, decidimos hacer, para dejar de pagar alquiler y unificar las oficinas de secretaría de inspección – con todo lo que paga hoy la provincia en alquiler- cuando tenemos un edificio propio que es el de la Clínica. De provincia son 20 millones y el municipio pondrá 6 millones propios”.

“Nosotros atendemos las necesidades y los pedidos de la Unidad Educativa de Gestión Distrital y no hay ningún pedido en UGD de obras de gas. Todos los pedidos que tenemos son de obra, porque las obras de gas, de mantenimiento, de calefacción se va haciendo con el dinero que tienen, de mantenimiento, que tiene afectado el Consejo Escolar. Si hubiera o hay un pedido especial y tuviéramos partida –porque ahora las tenemos todas afectadas- y no tuviéramos dinero comprometido, podemos retirar dinero y hacer las obras. Es más, si hubiera una obra grande de pedido, se podría llegar a postergar una obra. Lo que nunca hacemos es que quede dinero en el banco sin atender alguna escuela”, aclaró Torrontegui.

Para finalizar, el funcionario expresó “yo creo que la calidad educativa debe pasar primero por los establecimientos y la comodidad de los docentes y los alumnos. Lo que sí digo es que no se sabe dónde está el problema, como en el caso de la ENET, yo no tengo pedidos del consejo escolar sobre esa escuela. Lo que me dicen es que eran pérdidas menores y a la escuela la estaban revisando incluso cuando fueron estaba el gasista trabajando. Yo considero que lo primero que hay que hacer es determinar ciertamente como está el establecimiento escolar, hacer una prueba de hermeticidad y si hay que reparar, hacerlo como lo que estamos haciendo”.

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