Tres detenidos en la comisaría décima de Rosario se fugaron del calabozo. Un policía forcejeó con los presos para evitar la huida y resultó herido de gravedad por arma de fuego.

"Pidieron agua, abren la celda y se produce la pelea. Se trenzaron en lucha con los policías, no solamente esos tres sino también otros más", detalló el ministro de Seguridad de Santa Fe, Claudio Brilloni. Tres horas después de la fuga, uno de los presos se entregó en otra seccional de la zona y otro fue recapturado.

Brilloni explicó que los presos "no tienen antecedentes graves" y que el disparo que hirió al policía fue con el arma reglamentaria cuando este forcejeó para evitar la fuga. Al ser una herida grave en el tórax, el oficial fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez donde fue operado y su estado es reservado.

La zona fue testigo de un fuerte operativo policial para dar con los prófugos. Uno estaba apresado por amenazas agravadas por el uso de arma de fuego, otro por robo simple, en grado de tentativa, y el último por amenazas, violación de domicilio, daños, desobediencia judicial, daño agravado, lesiones, resistencia a la autoridad, en calidad de autor y concurriendo realmente.

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