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En la tarde noche de la víspera se realizó la autopsia sobre el cadáver de la joven que fuera abandonada sin vida en la Guardia del Hospital Español de Bahía Blanca y que está vinculada con la detención del puntaltense Nicolás Martínez (28), causa caratulada en principio por la UFIJ Nº 3 como responsabilidad por abandono de persona seguido de muerte.
Los resultados preliminares del estudio forense establecen que la menor murió por una falla cardíaca generalizada por sobredosis, sin establecer la sustancia debido a que se aguardan los estudios histopatológicos, confirmándose que no hubo lesiones externas de connoten golpes y sí un edema pulmonar agudo. Los estudios tampoco dan mayores detalles sobre si hubo o no violencia sexual.
El vehículo es la clave para establecer que sucedió
Además de los registros de las cámaras de la Guardia del Hospital Español que dieron cuenta de la huída de Martínez, el otro dato clave aportado por integrantes de la familia de la menor guarda relación con el vehículo “Gol blanco” en el que se desplazaba el mayor.
Precisamente sobre los primeros minutos del sábado, un sujeto pasó a buscar a la joven en un vehículos de estas características, el mismo que horas más tarde fuera rastreado por las cámaras del sistema de seguridad urbana de Bahía Blanca, no solo en su trayecto hacia Punta Alta sino también en inmediaciones de otros dos nosocomios, el Italiano Regional del Sur y el Interzonal José Penna.
La investigación policial trata de establecer cuáles han sido los hechos anteriores a las 24 horas de la aparición ya sin vida de la joven en el hospital de calle Estomba, ya que la familia estuvo durante la jornada del viernes en Monte Hermoso.